domingo, marzo 30, 2008

Viaje a China? Otra vez será...

Hola a todos!

Estoy aquí de nuevo con otro de mis episidios. Para seguir ejerciendo de Marta la pupas, os cuento lo que pasó con mi viaje a China. Como algunos sabéis, Antonio y yo, junto con más amigos, íbamos a hacer unas vacaciones a China con motivo de la boda de nuestro querido Jose.

Pues como me puse malita de asuntos femeninos de nuevo nos quedamos sin viaje así que hubo que improvisar y nos fuimos a España, a casita de mamá para descansar y tener una buena tanda de mimos.

Estuvimos unos días en Alicante y luego en Madrid. En Alicante nos hizo un tiempo estupendo, paseando por la orilla de la playa, comiendo en un restaurante al lado del mar... qué bien se come en España por dios!

En Madrid también lo pasamos muy bien, descansando sobre todo, que a los dos nos hacía mucha falta. Hemos dormido como osos gracias a ese estupendo invento que se encuentra ausente en los hogares irladeses... tachán!! la persiana. Parecerá una tontería, pero menuda diferencia!!

Y otra cosa estupenda de estar en España, y encima por Semana Santa son... LAS TORRIJAS. Ese peazo de pan estupendo riquísimo. Mi mami estuvo haciendo torrijas un par de días y madre mía que gustazo comerselas... parece mentira que una cosa tan sencilla pueda estar tan buena. También tuvimos una buena dosis de procesiones por la tele para completar lo carnal con lo espiritual ;D

Así que bueno, a pesar de habernos quedado sin viaje a China hemos podido disfrutar de otras cosillas. Lo que más pena me da es no haber visto a los amigos... pero bueno, espero que sea en otra ocasión.

Os dejo un par de fotillos, la super chef torrijera es mi mami, mi Chuchalillos con su cojín nuevo y mi hermano Carlos y Antonio

Abrazos y achuchones



domingo, marzo 02, 2008

Tengo envidia

Te quiero tanto que tengo envidia.

Envidia de todas las cosas que pueden tenerte mientras yo no te tengo.

Tengo envida del sol, que puede iluminar tu cara tanto como mi sonrisa.

Tengo envidia del agua, que cada mañana recorre tu cuerpo desnudo con ligereza

Tengo envidia del aire, que entrando por tu nariz alimenta todo tu cuerpo y te da vida

Tengo envidia de tu ropa, que se abraza a ti todo el día como yo lo querría

Tengo envida de tus consolas, que pueden acompañarte en todos tus viajes mientras yo tengo que esperar tu vuelta contando las horas

Tengo envida de todo aquello a lo que regalas una mirada,

con esos ojos azules que son mi rumbo y mi destino.

Tengo envida de todo aquello a lo que concedes una sonrisa,

con esos labios que cada día me hacen estremecer.

Tengo envida de todo aquello que tocas, con esas manos que parecen hechas solo para acariciarme a mi.

Envidia sí, tengo envida, y la seguiré teniendo siempre, porque tú eres mi tesoro, mi mundo, mi vida, y todo aquello que, aunque sea tan solo por un instante, logre alcanzarte, me dará siempre envidia