Relaciones padre hijo...

Hola,

Estaba aquí tonteando con el ordenador y he encontrado un par de poesías sobre los Padres (http://diadelpadre.yaia.com/poesias.html) que me gustaría copiar y editar muy ligeramente. Es curioso cómo acudimos a palabras de otros buscando encontrar algo parecido a lo que nosotros sentimos. Cómo necesitamos a ese desconocido que sea capaz de convertir en palabras a nuestras emociones.

Recuerda papá

Que la armonìa entre tù y mamà
me darà seguridad ante la vida y
harà de mì un triunfador o un frustrado.
Que de tu amor depende mi capacidad
de amar cuando sea adulto.
Que soy muy feliz cuando vienes a mi cama y me arropas,
como cuando hacía la abuela contigo cuando eras chico.
Que lo que yo aprendo contigo
lo recordarè toda la vida.
Que el amor y respeto
que demuestres por los demás
serà el amor y el respeto
que yo les tenga cuando sea adulto.
Que serás siempre esa figura que me ha enseñado
a caminar por el sendero de la vida con la cabeza alta
y con la que he aprendido todas esas cosas
que no se aprenden a través de los libros.


Mi Padre, cuando Yo tenía.....

4 años : Mi papá puede hacer de todo.
5 años : Mi papá sabe un montón.
6 años : Mi papá es más inteligente que el tuyo.
8 años : Mi papá no sabe exactamente todo.
10 años : En la época en que mi papá creció,
las cosas seguramente eran distintas.
12 años : Oh, bueno, claro,mi padre no sabe nada de eso.
Es demasiado viejo para recordar su infancia.
14 años : No le hagas caso a mi viejo.
¡Es tan anticuado!
21 años : ¿Él? Por favor, está fuera de onda,
sin recuperación posible.
25 años : Papá sabe un poco de eso,
pero no puede ser de otra manera,
puesto que ya tiene sus años.
30 años : No voy a hacer nada hasta no hablar con papá.
40 años : Me pregunto cómo habría manejado esto papá.
Era inteligente y tenía un mundo de experiencia.
50 años : Daría cualquier cosa por que papá estuviera aquí
para poder hablar esto con él.
Lástima que no valoré lo inteligente que era.
Podría haber aprendido mucho de él.

También he encontrado otras poesías, pero hablaban de los padres cuando tenían el pelo cubierto de canas, ya siendo ancianos.

La realidad es que yo nunca veré esa faceta de mi padre. Nunca podrá acompañarme al altar el día de mi boda, como tantas veces soné, ni jugar con mis hijos, ni venir a mi casa con mi madre como dos abuelitos….

Así que si estás leyendo esto, sólo puedo decirte que aproveches todo lo que puedas de lo que tienes. Que nunca sabes cuándo podrías perderlo.